La ansiedad es un termino general que corresponde al estado emocional caracterizado por temor,
tensión, sufrimiento ante algo que va a suceder o está sucediendo. Esta ansiedad suele afectar la
conducta alimentaria hacia una disminución de la ingesta o una sobre ingesta, siendo lo segundo
lo más común en la población.
La ansiedad alimentaria es un desorden que se caracteriza por una necesidad de comer con
impulsividad y de manera descontrolada, especialmente alimentos hipercalóricos, sin presentar
hambre, terminando este episodio muchas veces con culpa y sentimientos negativos.
En estas situaciones esa “hambre” es en realidad algún asunto sin resolver, ya sea un pendiente
del trabajo, algún problema familiar, económico, etc. Esto a largo plazo favorece el desarrollo de
sobrepeso u obesidad y con eso diabetes, hipertensión, desorden alimentario, etc.
Actualmente, en el día a día se reconocen diversas causas de estrés que activan esta ansiedad
alimentaria, por lo que es importante reconocerla y tratarla para prevenir las consecuencias antes
mencionadas.
¿Cómo tratarla?
El tratamiento de la ansiedad alimentaria es integral, es decir requiere trabajar de distintas áreas
como; psicológica y emocional, alimentaria y física.
En cuanto al área psicológica y emocional, es importante identificar que es lo que esta gatillando
esta ansiedad alimentaria. Es útil realizarse las siguientes preguntas:
¿En que momentos suele sucederme esto?
¿Qué me pasa y que pienso antes y después de estos momentos?
Es relevante hacerse estas preguntas para que sea más fácil de prever estas situaciones y de
elaborar estrategias que ayuden a evitarlo.
Por otro lado, en el momento en que se presenten estas ganas de comer con impulsividad, deben
realizarse las siguientes preguntas:
¿Tengo realmente hambre con sensación de estómago vacío?
¿Qué es lo que realmente me tiene ansios@?
¿Qué emoción estoy experimentando?
Además, hay tratamientos que acompañan este proceso como la auriculoterapia y/o acupuntura
que ayudaran a reducir los niveles de ansiedad.
En cuanto al área física, se recomienda realizar ejercicio, ya que se ha visto que aumenta la
producción de endorfinas que son neurotransmisores (mensajeros del cerebro) que producen
sensación de bienestar, felicidad, reduciendo así el estrés y los sentimientos negativos.
En cuanto al área de alimentación, se recomienda:
Estar hidratado: muchas veces el cerebro confunde la sensación de sed con hambre.
Consumir fibra: La fibra esta presente en frutas, verduras y carbohidratos integrales. Esta
al hidratarse en nuestro organismo forma una especie de gel que genera saciedad, lo que
evita comer a deshoras. Intenta consumir al menos un alimento rico en fibra por tiempo
de comida (desayuno, colación, almuerzo, etc.)
Comer despacio: esto ayudara a ser consciente de lo que se esta comiendo, a mandarle
señales de saciedad al cerebro para que pueda indicarnos que esta saciado y que
realmente no es necesario seguir comiendo porque el estomago ya esta lleno.
Comer los requerimientos que tu organismo necesita: muchas veces se realizan dietas
extremas para bajar de peso y se pasa mucha hambre lo que genera mayor ansiedad
alimentaria. Por eso, se recomienda seguir una pauta de alimentación balanceada y
nutritiva en la cual se esté consumiendo lo que el organismo necesita y en la cantidad
adecuadas, aun así se puede lograr bajar de peso pero de manera saludable.
En clínica Kymi queremos ayudarte a reducir tu ansiedad alimentaria, ¿Cómo? contamos con
asesoría nutricional para trabajar todos los factores antes mencionados con nuestra nutricionista
quien busca apoyarte en esta nueva etapa, además contamos con asesoría kinesiológica para
comenzar a realizar actividad física y liberar endorfinas como parte de tu mejora continua y
medicina china para que puedas tomar una hora de acupuntura y/o auriculoterapia.
¡Te esperamos!